Encontrar y no buscar a las personas

La diferencia entre estas dos palabras es lo suficientemente amplia como para saber qué es lo que quiere uno en la vida. Para nosotros, lo más importante es encontrar a las personas afines, con la que construir sea fácil y natural.

Cuando inicié mi vida laboral para diferentes empresas, el principal objetivo estaba en buscar los potenciales clientes que pudieran comprar nuestros servicios, en esos momentos siempre estaba en el sector servicios, por lo que mis “productos” no eran tangibles, desde campañas publicitarias, eventos, búsqueda de patrocinios o promociones comerciales. Mis superiores me decían que, para generar negocio, siempre se tenía que buscar a los clientes. Ir de caza todos los días. Claro está que canales como la llamada telefónica y el correo electrónico eran mucho más respetados que hoy en día –hablamos de inicios de siglo XXI–.

Y aunque no me podía quejar del éxito de mis resultados, me sentía con ganas de crear mi propio camino.

Buscadores o trobadores, dos modelos antagónicos

Creo que podemos diferenciar dos caminos en la vida para obtener lo deseado o anhelado por uno mismo

El primero es el de la búsqueda. A priori, es el más utilizado por todo el mundo alguna vez.., o siempre. El que, por lógica, deberíamos seguir para intentar conseguir nuestros objetivos. Uno mismo se crea una estrategia para llegar a las personas clave de su negocio, que le permita obtener lo que pretende, ya sea un negocio, promocionar de cargo o simplemente crecer en su puesto de trabajo.

A mí no me gusta este camino porque choca frontalmente con mi manera de pensar y actuar. Cuando buscas a alguien, y actúas de manera sincera basando tu estrategia en esos valores humanos como la transparencia, la honestidad o la compartición, te encuentras que, en la mayoría de las ocasiones, las personas que tienes enfrente, no son las adecuadas para tus objetivos. Eso sucede por muchos motivos, pero los principales son los siguientes: a casi nadie les gusta que te “vengan de frente”, de manera directa y sincera, con los motivos muy claros. Transmiten el efecto opuesto al deseado, demasiado bueno para ser verdad, demasiado claro todo. La falta de rodeos, crea más desconfianza que proximidad. Desilusiones, hipocresía, malos entendidos, son algunos de los “activos” que se obtienen con esta estrategia. Aun así, las aceptamos y seguimos buscando las “pepitas de oro” en forma de personas, porque sólo por probabilidad, debe suceder. Aunque no tenemos tantas vidas como un gato como para creer que el final siempre será feliz.

La segunda estrategia es la de encontrar a las personas. Pero ésta puede ser que, como las estabas buscando, a las personas adecuadas me refiero, esa vía te puede permitir encontrarlas. Es posible, pero como he dicho antes, nunca sabes cuándo puede pasar eso y si tendrás fuerzas y vida para disfrutarlo.

Cuando me refiero a encontrar a una persona o personas, se debe hacer de manera no directa. Por lo que debe ser siempre indirecta, como si no quisieras que ello sucediese.

La estrategia se basa en una comunicación muy directa y transparente de lo que uno es y espera de la vida profesional. Compartir tus rasgos personales en la comunicación es imprescindible para encontrar a tus afines. Valores, inquietudes, reivindicaciones, posicionamientos, son rasgos que te facilitaran la tarea de llegar a esos alter egos.

Pero es que, además, la sociedad de hoy en día, te ofrece muchas vías para facilitarte la labor. Redes Sociales como LinkedIn se han hecho imprescindibles para canalizar esas corrientes de manera más o menos ordenada. Pero como cualquier herramienta, si su uso es indebido, provoca el efecto contrario.

Eso lo digo por los que “te buscan” en esa red social y sin conocerte, te explican lo que son y lo que quieren ofrecerte. Para mí esa opción es invasiva y muy negativa. Me produce rechazo casi instantáneo. Transmiten imposición, presión y hay nula empatía.

Todo un arte, y no es para todos

En cambio, es una herramienta maravillosa cuando eres “indirecto”. Pero eso, ¿qué quiere decir? Pues que debes comunicar “hacia el cielo”, y no hacia una persona en concreto. Transmitiendo tu/s mensaje/s de manera clara, concisa y transparente. Al ser un envío indirecto, es como si estuviera cifrado, y que sólo las personas que lo pueden descifrar lo reciben correctamente. Eso es genial porque sí que llegas al público objetivo que te habías propuesto o imaginado. Pero no lo haces controlando el timing, es decir, que la recompensa, encontrar a las personas afines, surgen sin saber cuándo será. Parece arriesgado, pero debo decir que es un riesgo controlado. ¿Por qué? Pues porque para ello debes utilizar una estrategia de comunicación, una hoja de ruta, para que tu mensaje llegue claro y de manera constante, a tu público objetivo.

Así conseguirás estimular a una pequeña cantidad de ellos y querrán contactar contigo. Puro arte de relaciones humanas.

La Afinidad: acelerador de negocio

Cuando se produce “el encuentro”, las sensaciones son indescriptibles. Solo con pocas palabras se denota que hay coincidencia en muchas de las posturas. Y eso permite que todo vaya mucho más rápido. ¿cómo es posible? Pues porque en tu comunicación has transmitido tus valores humanos, y la otra parte, que también converge con ellos, se ha visto reflejado en sí mismo, y le resulta mucho más fácil “dar el paso” para conocerse y explorar alianzas o proyectos juntos.

Ese es mi secreto, y no lo es tanto porque lo comparto con vosotros. La evolución de mi vida laboral me ha transmitido que sólo puedes avanzar y crecer con personas afines a tu lado, que elimina el mal Karma y te estimulan hasta límites infinitos. Para acercarlas, cuál imán al metal, debes ser tú mismo, no mentir, es decir, ser sincero en tus voluntades y compartir valores como la transparencia, la excelencia profesional y la honestidad.

Estoy convencido de ello porque así me ha pasado, y es la mejor manera de encontrar a las personas que necesitas para triunfar en la vida profesional.

En Made in Spain Gourmet no podíamos saber por dónde empezar a “buscar” a las personas que creíamos que necesitaríamos para llevar adelante el proyecto. Sabíamos qué queríamos conseguir con nuestra idea. Por lo que NO fuimos a buscar a las personas, preferimos encontrarlas por el camino. Y cada día que pasa, topamos con gente maravillosa que sólo hace que reforcemos ese espíritu. No solamente en España, sino ya nos la estamos encontrando por todo el mundo.

Nuestro éxito es saber comunicar lo que queremos transmitir, el resto, viene solo, pero porque comunicamos a diario. Sin constancia, olvidaros de este camino. Seréis siempre del grupo de los buscadores. Y tú, ¿qué camino prefieres seguir para conseguir tus objetivos?

made in spain gourmetIsrael Romero, CEO de Made in Spain Gourmet

AUTOR: Israel Romero, CEO de Made in Spain Gourmet.